A lo largo de su historia, la Hermandad ha mantenido vínculos estrechos con otras hermandades y cofradías. Ya hemos tenido ocasión de referirnos a algunas de ellas cuya vinculación, a la par que más estrecha, ha sido perdurable en el tiempo. Aquí dejaremos resaltadas las habidas con otras corporaciones que, casi desde los inicios de la historia de nuestra Hermandad hasta épocas recientes, han propiciado una cercana relación con ellas.
Y así, en primer lugar, tendremos que remontarnos a aquellos años de la II República, en los que el cierre de la iglesia de la Anunciación va a propiciar el acercamiento y confraternización con las hermandades radicadas en el templo del Divino Salvador. El 30 de abril de 1932 se procede de manera fulminante a la clausura de la Anunciación al que ya hemos tenido ocasión de referirnos (véase “El Cierre de la Anunciación”), quedando las Sagradas Imágenes en el interior de su capilla y notificando el Rector D. Estanislao del Campo, en lacónico escrito, que al cesar el Capellán de la iglesia, “…efectivamente, ha quedado suspendido el culto en la Capilla de la Universidad…”, considerando el Rector no tener atribuciones con respecto a las actividades de la Hermandad, por lo que emplaza a ésta a dirigirse en solicitud de autorización para el mantenimiento del mismo, al Ministro de Instrucción Pública. Desconocemos las razones que llevaron a la Junta de Gobierno a no trasladar de la capilla la imagen de la Santísima Virgen, que era propiedad de la Hermandad, pero lo cierto es que desde aquella fecha ambas Sagradas Imágenes quedaron en el interior de la Anunciación sin que los hermanos tuvieran opción de rendirle culto.
A pesar de ello y durante los años en que perduró el cierre del templo, la Hermandad va a continuar celebrando sus cultos, trasladándolos a la parroquia del Salvador. Y así, gracias a la colaboración de las hermandades de Pasión y el Amor con sede en dicha parroquia, se instalan sendas fotografías de las sagradas imágenes de la Hermandad en las capillas de San José y Virgen de los Dolores, fotografías que fueron cedidas por D. José María González Nandín. Precisamente, en el inventario de bienes que se levanta el 21 de abril de 1933 y que consta en el archivo de la Hermandad, se hace constar que “en la iglesia del Divino Salvador y en el altar de la Virgen del Rosario y en el de San José, existe y con carácter provisional un cuadro del Santísimo Cristo para su veneración. Un cuadro de la Santísima Virgen para idem. Ocho candeleros de metal chicos. Cuatro floreros”.
Desde esa estancia forzada en la citada parroquia, la Hermandad mantuvo con estas hermandades una relación permanente en el tiempo, con asistencia institucional a las fiestas religiosas de cada una de ellas. El traslado de la Hermandad a la calle San Fernando en 1966, va a enfriar sin embargo esa vinculación hasta hacerla desaparecer con el transcurso de los años.
==o==
Desde el año 1928, una representación de la junta de gobierno de la Hermandad va a recibir, con Estandarte y varas, a la hermandad de la Amargura a su paso por la puerta de la iglesia de la Anunciación en la tarde-noche de cada Domingo de Ramos. Probablemente la razón de no hacerlo en los cuatro años anteriores (la Hermandad se funda en 1924), sea debido a que la Hermandad carecía de Estandarte puesto que sí consta en el archivo de la secretaría, que al acto de constitución de la nueva hermandad de San Esteban que tuvo lugar en los primeros meses de 1928, la Hermandad no asistió precisamente por no disponer aún de la referida insignia. El contrato de 20 de enero de 1928, firmado con Dª Concepción Fernández del Toro para la confección del primer estandarte, va a dotar a la Hermandad de éste, por un precio total de 1.250 pesetas, a satisfacer en tres plazos, comprometiéndose la bordadora a tenerlo finalizado el 30 de marzo, por lo que la insignia sería estrenada en la Semana Santa de ese año.
Es el comienzo de una nueva relación entre ambas corporaciones que se va a traducir incluso hasta en la cesión de enseres a la Hermandad, como la de unos candelabros de tres luces “entrevarales”, que se colocaban en la trasera del paso de palio de la Virgen de la Angustia, candelabros que acabarían siendo adquiridos por la Hermandad y utilizados en años sucesivos hasta la ejecución de los grandes faroles de cola en el año 1974, estrenados con motivo del Cincuentenario de la Hermandad.
O como la cesión de túnica y mantolín bordados, solicitados a préstamo a la hermandad de la Amargura para la imagen de San Juan y durante los días de celebración del Quinario en el año 1943.
También, el traslado de la Hermandad a su nueva sede en la antigua Fábrica de Tabacos va a hacer desaparecer esa vinculación con la hermandad del Domingo de Ramos. Ese mismo día del año 1966 es el último en el que se recibe, a su regreso, a la hermandad de San Juan de la Palma a su paso por la calle Laraña, depositándose una canastilla de flores a los pies de la Dolorosa. En noviembre de ese año la Hermandad iniciaría una nueva página de su historia en su nueva sede de la calle San Fernando.
De la adquisición por parte de la Hermandad de 200 kilos de plata para la realización del paso de palio, se sirvieron concretamente dos hermandades, la de la Amargura y la del Gran Poder, quienes dirigieron sendas solicitudes de una cantidad determinada de plata laminada (respectivamente, dieciséis y cinco kilos de este metal), a fin de no retrasar los trabajos de orfebrería que se encontraban en ejecución y hasta tanto les fuera dispuesta por la Sociedad de Metales Preciosos que controlaba su comercio. Recibidas dichas solicitudes, en el Cabildo de Oficiales de 11 de octubre de 1945, fueron autorizadas dichas entregas que serían posteriormente devueltas por aquellas hermandades.
==o==
Con la hermandad del Gran Poder y a instancias de Luis Ortiz Muñoz, tiene lugar una colaboración a finales del año 1960, cuando aquella interesa la cesión de tres elementos del “paso” de palio de la Hermandad para ser trasladados a Madrid con motivo de la exposición que, con el patrocinio del Ministerio de Información y Turismo, se llevaría a cabo en el Círculo de Bellas Artes de la capital al objeto de recabar fondos para la construcción del nuevo templo de Jesús del Gran Poder. Como curiosidad reseñar que los elementos solicitados, como así consta en el escrito que a la Hermandad dirige el Vizconde de Dos Fuentes, hermano mayor del Gran Poder, de fecha 17 de diciembre de 1960, son el techo de palio, frontal del respiradero así como las seis jarras de plata cinceladas del mismo, con una valoración total, a efectos del seguro correspondiente, de un millón quinientas mil cincuenta mil pesetas, más otras dos mil por un faldón. Sea como fuere, la exposición se celebró en Madrid con amplia difusión en la prensa de la época, y en agradecimiento a la colaboración prestada por la Hermandad, la del Gran Poder hizo entrega de una fotografía enmarcada del Señor.
Precisamente, la hermandad del Gran Poder, junto con la de Jesús Cautivo y la de la Virgen de la Paz de la parroquia de San Sebastián, colaboraría económicamente en la construcción de una iglesia en la India, finalizada en el año 2008, proyecto de la Hermandad del que hablaremos en otra ocasión.
A la Virgen del Valle, con motivo de su coronación canónica en el año 2002, se le hizo entrega de una medalla de oro del Stmo. Cristo que, en muchas ocasiones, la Virgen lleva prendida en su saya.
(Esta entrada de la sección de ‘El Retrovisor’ ha sido elaborada por N.H.D. Antonio Gutiérrez de la Peña)